lunes, 15 de diciembre de 2008

EL EMPLEO EN MÉXICO

En este país hay una infinidad de problemas por solucionar, hay algunos que lejos de mostrar mejoría parecen insalvables y cada vez empeoran más y para muestra está el desempleo. Cada vez que se acerca el período de elecciones se inunda a la ciudadanía con millares de promesas para solucionar el desempleo, que en caso de que se cumplieran México sería un ejemplo a seguir por todas las demás naciones en el mundo, con tasas de crecimiento sostenidas y envidiables. Hablar es fácil, prometer la creación de un millón de empleos diarios si se quiere es demasiado simple, lo que sea por convencer al sector de la población que votará. Una vez logrado el asenso se puede poner en cargos importantes a los amigos, a los más queridos dentro del club más cercano al presidente en turno, quienes aplicarán políticas anodinas, envueltas con su correspondiente ola publicitaria, dirigidas a mitigar, en el papel, la desocupación. Sin embargo la realidad se nos presenta cruda a la mayoría cuando no llegan los resultados esperados.
El jueves 21 de agosto del presente el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI) dio a conocer la situación del mercado laboral en México correspondiente al mes de julio. Los datos ofrecidos son muy desalentadores. La tasa de desempleo en este mes fue de 4.15% de la Población Económicamente Activa (PEA), la más alta alcanzada desde que comenzó el sexenio y la más elevada para julio desde hace ocho años.
Lo anterior significa que en México, según los datos oficiales, hay alrededor de un millón 800 mil personas que buscan empleo sin encontrarlo. Según este informe, en julio de 2008 había 344 mil personas más engrosando el sector desocupado de la PEA que en diciembre de 2006, lo que representa un incremente de más del 20% en la cantidad de personas desocupadas desde comienzos del presente sexenio.
El efecto de esta situación se sesga con mayor fuerza hacia las mujeres. En el sector femenino se incrementó en un 0.2% de julio del año pasado a julio del corriente al incrementarse de 4.32 a 4.52%. La tasa de desocupación masculina se incrementó de 3.73 a 3.92% en el mismo lapso de tiempo.
Es notorio pues que las políticas implementadas en materia de empleo, en el supuesto de que éstas existen, han resultado ser estériles y parece que el desarrollo económico de este país está no sólo estancado sino en franco retroceso.
No debemos olvidar entonces las cifras reales cuando estemos ante las promesas que periódicamente se nos presentan.

No hay comentarios:

Publicar un comentario